Descubre todas las divertidas sorpresas que esconde este palacio de los Contrarios en cada una de sus ventanas troqueladas. El hada buena y la bruja malvada son muy diferentes: si una sube las escaleras, la otra las baja; si una cierra una ventana, la otra la abre; si una tiene de mascota un gato negro, la otra un unicornio blanco. ¡Son como la noche y el día! ¡Aprende los contrarios con estas divertidas compañeras de palacio!