Los sueños son tan importantes en la vida diaria como la realidad misma, porque en ellos liberamos tanto las pasiones mundanas más atrevidas y prohibidas, como nuestras más altas necesidades espirituales. Si en algún sitio se manifiesta con fuerza lo que guardamos en el inconsciente es, sin duda alguna, en el complejo mundo de los sueños. Todos los sueños, absolutamente todos, llevan un valioso mensaje implícito en sí mismos que puede servirnos para conocer nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro, entre otras cosas.